Archivo de junio 2019

Parte 2: Vigilancia Tecnológica e Inteligencia Competitiva en el sector alimentario

Adaptarse a los cambios tecnológicos y empresariales ha sido una de las claves para implementar un proceso de Inteligencia y Vigilancia. A medida que la empresa ha crecido durante estos 50 años, los ámbitos geográficos en los que trabaja también han aumentado por lo que la labor de estar cerca de los clientes, capturar las tendencias y entender las necesidades y problemas se ha convertido en una labor más compleja. Tener una red de analistas capturando y analizando esta información para colocarlo en un repositorio accesible para toda la empresa facilita la toma de decisiones a distintos niveles dentro de la organización.

Este proceso también ha permitido a Ausolan ser más eficaces en la captura y trasmisión de la información, de tal forma que la iniciativa ha cogido fuerza y está siendo parte de la cultura empresarial a medida que transcurre el tiempo. También cabe destacar, que son ellos quienes mejoran el sistema a medida que identifican nuevas necesidades y oportunidades por lo que cuentan con absoluta libertad y criterio para modificar sus parámetros de búsqueda y adaptar de esta manera los Factores Críticos de Vigilancia.

Por tanto, la escalabilidad con la que han continuado implementado el proceso de Vigilancia Tecnológica e Inteligencia Competitiva ha sido un factor determinante para que esté teniendo aceptación dentro de la empresa. Empezar por pequeño, en un departamento en concreto para después escalar y expandirlo al resto de la organización, es una práctica que recomendamos ya que lograremos evitar algunas de las barreras que bloquean la implementación de este tipo de proyectos. 

Para ver la entrevista completa, pinchar sobre este enlace. Si te perdiste la primera parte, pulsa aquí para ver al vídeo. 

Diferencias entre software libre y comercial

Cuando escuchamos la palabra software libre, a menudo pensamos que se trata de algo gratis. Sin embargo, detrás del software libre hay grandes profesionales y empresas que prestan diferentes servicios ayudando a su implantación, parametrización, etc.

Muchas veces se piensa que lo puede implantar cualquier persona sin conocimientos técnicos, como si se tratase de chrome o cualquier programa paquetizado. Restando importancia a estos profesionales y su servicio. Estos, pueden estar asociados a la instalación de la infraestructura, personalización de interfaz, nuevas funcionalidades o costes de mantenimiento y soporte.

Por ello, queremos hablar sobre las diferencias entre los dos modelos de negocio. Cabe destacar que ambos pueden funcionar correctamente dependiendo de las características de la organización, lo más importante es entender qué estamos eligiendo y si será lo mejor para nosotros en el medio-largo plazo.

Es importante entender que los softwares comerciales no son más caros “per se” porque tienen licenciamiento, sino que incluyen todos los costes anteriormente citados dentro de la licencia. Además, este tipo de softwares cuentan con mayor control y capacidad para el desarrollo tecnológico de su producto, lo cual ofrece garantía de estabilidad a los clientes.

Por otro lado, el software libre necesita de recursos informáticos, es decir, hardware y software, y mantenimiento de bases de datos, copias de seguridad… que se traducen en horas de personal de sistemas y gasto en infraestructura. Cabe destacar también que la personalización, necesita conocimientos de la arquitectura y software utilizado y que los cambios realizados en su personalización pueden impactar con las siguientes versiones del software, dificultando su actualización.

En esta línea, cabe destacar que Innguma es un software como servicio (Saas) en el que te despreocupas de todo, no tienes que hacer ningún tipo de mantenimiento y el personal de sistemas TICs y seguridad de la empresa no tiene implicación, más allá de comprobar que se cumplen los requisitos demandados por estos. Además, dispone de personalización, con soporte técnico y consultoría, y continuamente el software está actualizado y disponible las 24h/365 días.

El modelo Saas cada día se ve con más naturalidad, ejemplos claros son Netflix, HBO o Spotify en los que el cliente consume el servicio bajo demanda cambiando tendencias anteriores como las descargas y almacenamiento en local.

En Innguma apostamos por el servicio en formato Saas y su licenciamiento, consideramos que es la forma más accesible y rápida para que el cliente tenga a su disposición una plataforma de Inteligencia competitiva robusta y testada con más de 100 millones de noticias procesadas. Con un compromiso de continua evolución en: funcionalidades, adaptaciones transversales, y seguridad.

Barreras y facilitadores para la Vigilancia Tecnológica

La excusa o barrera que se repite con más frecuencia y que supera al resto con creces es la percepción que se tiene sobre la falta de tiempo. Sin duda, la rutina del día a día es el peor enemigo de la IC:

Estas son las principales barreras:

  • Percepción de falta de tiempo o priorización de otras tareas.
  • Responsable con poco poder de mando.
  • Actitud inicial poco adecuada, por desconocimiento y experiencias previas.
  • Sobrecarga de trabajo de personas clave.
  • Exceso de detalle en la definición de los FCV.
  • Dificultad para hacer equipo entre departamentos.
  • Dificultades en la puesta en valor de la información generada.
  • Reducción de recursos.
  • Falta de explotación de los resultados.

 Y estos los principales facilitadores:

  • Respaldo de la dirección y compromiso por impulsarlo dedicando recursos.
  • Generación de información cercana a las necesidades reales.
  • Correcta definición de los Factores Críticos de Vigilancia.
  • Experiencia en actividades de IC de varios participantes.
  • Responsable con poder decisorio y experiencia.
  • Analistas comprometidos.
  • Soluciones personalizadas.
  • Correcta selección de la herramienta informática que ofrezca una solución fiable para la captura y difusión de la información.
  • Comenzar por pequeño para después escalar.

 

También citaremos algunas claves para que la implementación del proyecto tenga más probabilidades de éxito:

  • Establecer objetivos realistas y factibles.
  • Definir y distribuir responsabilidades.
  • Inclusión en el planteamiento estratégico de la compañía.
  • Planificar a nivel estratégico y táctico.
  • Definir los FCV acorde con los recursos y realidad empresarial.
  • Dimensionamiento, valoración de necesidades y asignación de recursos con un proyecto piloto.
  • Difusión de los resultados, incorporándolos a la toma de decisiones.
  • Sensibilización y predisposición hacia la Vigilancia Tecnológica.
  • Cultura empresarial abierta.
  • Implicación de los responsables de la empresa y liderazgo desde el ejemplo.

 

Como conclusión, es importante entender que la Inteligencia Competitiva es un procedimiento sistemático basado en las Normas UNE 166.002 y 166.006 que mejora la eficiencia de nuestros procesos diarios y no es una tarea añadida. Nos facilita capturar y valorar información para tomar decisiones de forma más segura y rápida.

Innguma automatiza los procesos de las normas UNE, lo que supone una mejora radical en la productividad diaria. ¿Sigues pensando que no tienes tiempo?